Banderas en las gradas en solidaridad con Palestina y protestas fuera del estadio ante la visita del Maccabi

Leer "Es el Maccabi, no los Lakers", carta enviada a el Correo español y Diario de Noticias de Álava, y no publicada.

Leer crónica de la protesta

El Mossad vuelve a tomar el Buesa Arena

La red Euskal Herria-Palestina se ha concentrado frente a las instalaciones del Baskonia en protesta por la visita del Maccabi de Tel Aviv a Gasteiz, que se enfrentará esta noche al Caja Laboral en el partido correspondiente a la Euroliga.

Medio centenar de personas, que portaban pancartas en las que se podía leer ‘Palestina aske’, ‘Israeli boikot’ o ‘Maccabi kanpora’, se han concentrado frente a la sede del club deportivo Baskonia en Gasteiz para denunciar que la visita del Maccabi de Tel Aviv es «éticamente inadmisible» por su implicación en un «crimen de guerra».

Esta acusación se debe a que el Maccabi publicó un reportaje de apoyo a la operación militar de Israel contra la población de la franja de Gaza desarrollada entre diciembre de 2008 y enero de 2009, en la que murieron unas 1.500 personas.Ante esta situación, la red Euskal Herria-Palestina ha pedido a la ciudadanía que «boicotee» el partido y que quienes acudan al encuentro conviertan el pabellón «en un clamor contundente por los derechos humanos en Palestina».

Esta plataforma ha convocado también una concentración en la plaza de la Virgen Blanca hora y media antes del encuentro para denunciar las prohibiciones impuestas por Lakua.

Miembros de la red han calificado de «muy grave» esta restricción porque va en contra de la «libertad de expresión» y han hecho una pequeña representación teatral para simbolizar que hoy «impera en la capital alavesa la legislación israelí y sus protocolos de seguridad».

(Naiz.info)

Apoyos a Palestina pese a las trabas

No hubo caravana a los alrededores de Zurbano debido a la prohibición del Departamento de Seguridad, pero sí se pudieron meter banderas y símbolos a favor de Palestina, siempre y cuando «no resultaran ofensivos hacia el Maccabi o a Israel». Ello no evitó, pese a la relativa calma en los alrededores del Buesa Arena, que los agentes de seguridad ralentizaran la entrada de los aficionados debido a cacheos. No faltaron banderas y carteles que mostraban el lema «Palestina askatu».

Por otro lado, un nutrido grupo de personas se agolpaba a las 19.00 frente a la sede del PNV en la plaza de la Virgen Blanca en la concentración promovida por la Plataforma de Apoyo a Palestina. Tras una pancarta que rezaba el lema «Palestina Askatu, EAJ-PNV Sionisten laguntzaile y Maccabi Kanpora», los participantes hicieron frente al frío del ambiente durante una media hora lanzando consignas tales como «Palestina Askatu», «Israeli boikota» y «PNV, sionisten morroi».

Desde esta plataforma mostraban su queja al afirmar que «cuando el Maccabi llega a Gasteiz, la ciudad se ve inmersa en un estado de excepción»

Es el Maccabi, no los Lakers

Carta enviada a el Correo español y Diario de Noticias de Álava, y no publicada.

Hay veces que se trata de explicar las cosas planas y no hay forma de que le entiendan a uno. Estoy escribiendo a cuenta de la petición de boicotear la visita del Maccabi a Gasteiz y la polvareda que se ha levantado. Que conste que entiendo que no se entienda, pero no lo comparto, claro.
Hay quien ha preguntado: ¿Y si vinieran los Lakers a Zurbano también les boicotearíamos? Pues no he estudiado el caso en profundidad, pero a lo mejor alguna persona que siga más a los Lakers, podría responder a estas preguntas:
¿Cuando los USA han tenido a bien bombardear a la población civil de alguna parte del mundo, han estado los Lakers (como institución me refiero) animando a los soldados?
¿Han puesto los Lakers en su página web un publireportaje para alentar algo que se ha considerado como crímen de lesa huminadad en los informes de la ONU?
¿Si vinieran los Lakers a Zurbano: podría ir yo con una bandera iraquí, afgana, palestina, sioux o cubana, sin que me la quitaran pacíficamente o a porrazos?
¿Si vinieran los Lakers a Zurbano: la CIA ordenaría a la Ertzaintza cual debe ser la manera de ‘controlar’ ese partido (‘protocolo de actuación’ se le denomina eufemisticamente) y a la afición baskonista, como lo hace el Mossad en cada visita del Maccabi?

Tranquilos es cuestión de tiempo, cuando se reclamaba el boicot a la Sudáfrica del Apartheid, también habría gente que diría: “¿y tenemos que boicotear a los Springboks (la selección de rugby de Sudáfrica) y si vinieran los San Francisco 49ers (ganadores de la Super Bowl en 1982)? Pues estudien historia del deporte, a ver qué pasaba entonces…

Ruben Sánchez Bakaikoa-ren blogan argitaratutakoa

El Mossad vuelve a tomar el Buesa Arena

Desde que el Baskonia juega Euroliga han sido ya muchas las ocasiones en que el Maccabi de Tel Aviv ha visitado el Buesa Arena. Una visita que lleva consigo un importante componente político por parte de los aficionados, en su mayoría más identificados con el pueblo palestino en el conflicto de Oriente Próximo.

Pero también trae consigo un cambio en el dispositivo de seguridad del Pabellón. La Ertzaintza ‘comparte’ en estos encuentros la información y la preparación del dispositivo con el Mossad, el servicio secreto que, tras la masacre de  Munich 1972, acompaña a todas las delegaciones israelís alrededor del mundo. En la memoria de los baskonistas queda aquel encuentro de 2002 en el que cientos de aficionados macabeos disfrutaron de una total inmunidad mientras la Ertzaintza requisaba banderas palestinas en el pabellón y una Estrella de David lucía en la bombilla de los Tiros Libres.

Hoy el dispositivo ha sido más liviano y se ha permitido la entrada de banderas palestinas, que han mostrado los aficionados de la grada de animación. Sin embargo, la Ertzaintza ha realizado un cacheo generalizado en algunos de los accesos. Al menos en el caso de las torres 5 y 9, la policía autonómica ha realizado registros de arriba abajo a gran parte de los aficionados, algo que no suele ocurrir en los encuentros del Baskonia, tan sólo en los declarados de alto riesgo.

Además, durante todo el encuentro al menos una decena de miembros de los servicios secretos (es difícil saber si eran todos del Mossad o también había algún miembro de la Policía Autonómica) han estado dispuestos a lo largo del pabellón. Dos de ellos tras el banquillo, y el resto dispersos por las bocas de salida del segundo anillo o incluso sentados en la grada; bien con traje o con ropa de incógnito y mochilas, pero siempre con un evidente pinganillo en la oreja. Cuando quedaba un minuto para la conclusión todos ellos se han reunido tras el banquillo israelí. Allí es donde han surgido los únicos problemas con la grada, aunque en este caso han venido provocados por la actitud chulesca del presidente de Maccabi, Shimon Mizrahi.

El presidente, que siempre se ubica junto a la cancha pero fuera del banquillo, ha ocupado durante todo el encuentro la zona reservada a los fotógrafos, primero en uno de los bancos y posteriormente en una silla. Mizrahi, ataviado con una bandera amarilla, ha presenciado el partido con total tranquilidad, mientras al final de cada cuarto Gur Shelef, el histórico jugador israelí y ahora miembro del cuerpo técnico, le acercaba las estadísticas.

Sin embargo, en el penúltimo tiempo muerto del partido Mizrahi, que se encontraba a apenas dos metros de Indar, se ha encarado con la grada de animación baskonista, que mostraba banderas palestinas. Tras ser tranquilizado por miembros del Mossad, Mizrahi ha recorrido con total libertad el anillo bajo del pabellón.  Lo ha hecho en una actitud que ha encendido al público. Pese a ello, los responsables de seguridad del pabellón no han limitado sus movimientos ni sus actitudes, y tan sólo ha cesado en su actitud tras la recomendación de Shelef.

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