En Buenos Aires se recordó el Aberri Eguna homenajeando a l@s pres@s y a Jon Idígoras

Organizado por Euskal Herriaren Lagunak (Amig@s del Pueblo Vasco, de Argentina), se realizó un emotivo y muy concurrido acto de recordación de la lucha del pueblo vasco, tanto la histórica como la actual. 

En ese marco, se proyectaron dos videos, uno que recoge las instancias de la imponente movilización realizada en enero pasado en Bilbao, por la amnistía para todos los presos y presas vascas, y otro, que recoge la vida del dirigente independentista revolucionario Jon Idígoras, homenajeando en él a todos los luchadores/as que a lo largo de décadas han ido plantando en Euskal Herria la semilla de la libertad y la reivindicación por la Independencia y el socialismo.

Hablaron en esta oportunidad los integrantes de EHL, María Torrellas (del periodico Resumen Latinoamericano) y Chacho Berrozpe, de la organización Fogoneros. La primera, hizo un relato pormenorizado de las coyunturas históricas en las que el "nacionalismo" español fue sentando las bases para impedir que el pueblo vasco logre su independencia a través de los siglos. Primero a través de las invasiones genocidas, luego con las llamadas guerras carlistas, posteriormente con la implantación del fascismo a través de la guerra contrarevolucionaria (mal llamada Guerra civil española) y la llegada de Franco al poder, y por último con las mal llamadas "democracias" continuistas del franquismo, que se prolongaron hasta el presente. 

Frente a todos estos intentos, siempre el nacionalismo independentista vasco opuso resistencia y fue abonando el terreno para que se dé el salto de luchar sólo por la independencia a plantearse en el horizonte la construcción de una nación socialista. Fue una lucha por todos los medios posibles, desde la resistencia civl hasta la vía armada, que han ido dando color a lo que
También, Torrellas evocó el perfil revolucionario de Jon Idígoras, dirigente obrero, fundador de la Central sindical LAB y uno de los creadores de la coalición Herri Batasuna, que luego fue proscripta por el imperio español.

Seguidamente, Chacho Berrozpe, habló de la lucha de los presos y presas vascas, de su compromiso para estar en la primera línea del frente de combate, poniendo el cuerpo, las ideas y el sacrificio para que Euskal Herria sea libre tarde  o temprano. También incidió en la necesidad (como integrante de EHL de la ciudad de Mar del Plata) de redoblar la solidaridad con el pueblo vasco y con sus prisioneros de guerra, sin aflojar un ápice en la idea de seguir avanzando hacia la independencia y el socialismo.

Posteriormente, se produjo un animado debate en el que intervino el público presente, entre los que se encontraban activos representantes de la diáspora vasca y un militante juvenil llegado desde Donosti-San Sebastián, quien aportó  testimonios sobre lo que sigue siendo la represión actual contra la resistencia vasca.

Al terminar la actividad política, como siempre se abrió la Taberna, donde aparte de confraternizar y comer exquisita comida vasca, se contó en esta oportunidad con la actuación de dos excelentes cantautoras. Se trata de Susana Ratcliff (canto y bandoneón), y la cantante y percusionista Ana Ponce (tumbadoras y cajón peruano), que mostraron los mejor del folclore latinoafrocaribeño, y fueron muy aplaudidas por los concurrentes.

El viernes 30 de marzo tuvo lugar otro acto por el Aberri Eguna

El viernes pasado, en el Centro Cultural Rosa Luxemburgo, de las Asambleas del Pueblo, también se evocó el Aberri Eguna con una charla en la que participaron los integrantes de EHL, María Torrellas y Carlos Aznárez. Coordinó el debate y pronunció unas breves palabras de apertura, describiendo la lucha del pueblo vasco a través de los tiempos, el referente de las Asambleas del Pueblo, Rubén Saboulard.

Torrellas describió lo que han sido las distintas celebraciones del Dia de la Patria Vasca en la Euskal Herria contemporánea. También puso el acento sobre el hecho de que mientras el pueblo construía una compacta resistencia popular orientada por la izquierda patriótica vasca (abertzale), en el otro extremo, la burguesía vasca ligada al Partido Nacionalista Vasco, no sólo puso palos en la rueda a esta lucha sino que en diversas ocasiones, traicionó abiertamente la misma, aliándose con el gobierno español.

Aznárez se refirió más al momento actual, describiendo todo lo ocurrido desde que la organización ETA decidiera poner fin a la lucha armada y ceder el protagonismo, por vía política, al pueblo vasco. Habló del triunfo de Bildu y Amaiur, que convierten a la coalición electoral abertzale en primera fuerza política, pero destacó también que "el pueblo vasco sabe que no sólo con votos se va a tumbar la genocida resistencia de los imperios español y francés en negarse a la independencia de Euskal Herria. Los votos sirven para marcar territorio, pero lo único que doblará la muñeca de los invasores será una fuerte y compacta organización popular, movilizada y a la ofensiva", acotó.

Reivindicó los principios históricos de que sin liberación nacional no puede haber liberación social, afirmando que ambas coyunturas son inseparables para que "el sacrificio de tantos gudaris (luchadores vascos)  no se frustre con el correr del tiempo". Por último, manifestó su optimismo por el devenir, "teniendo en cuenta lo que fueron las movilizaciones en defensa del centro social Kukutza, donde miles de jóvenes ganaron la calle para impedir su demolición y pelearon cuerpo a cuerpo contra la represión, y también lo ocurrido en ocasión de la huelga general del pasado 29, en la que cientos de miles de trabajadores y estudiantes, le demostraron a la derecha gobernante, que los vascos/as son vascos/as y no ratones, que sólo con lucha se podrá parar la embestida capitalista".