Onze de setembre de 2014: Desobeïm! Pel referèndum, per la independència i pels Països Catalans

Este 11 de Septiembre la izquierda independentista hace un llamamiento a salir a la calle a exigir que se materialice el referéndum de autodeterminación

MANIFIESTO

Este año hace 300 años de uno de los muchos episodios que nos han arrebatado nuestra libertad como pueblo. La defensa heroica de Barcelona por parte de los sectores populares, como la defensa de tantas villas y ciudades de los Països Catalans, marca nuestro carácter de pueblo rebelde. También recordamos que este año hace 355 años que el norte de nuestro territorio fue incorporado a Francia, que hace 307 que la Comunidad Valenciana fue sometido por la fuerza de las armas y de la represión más descarnada y que hace 299 que el último bastión de los Países Catalanes, Mallorca, caía en manos del centralismo borbónico. Desde entonces los Países Catalanes no hemos dejado de luchar. El pueblo trabajador catalán ha sido protagonista de las luchas más avanzadas de cada momento, y a día de hoy vuelve a estar en primera fila de la barricada.

Nuestra sumisión en España y en Francia se ha llevado a cabo mediante la ocupación militar pero se ha perpetuado mediante la compra sistemática de las élites políticas y económicas. Desde hace décadas hemos visto como quien decían ser nuestros dirigentes nos ha ido vendiendo a cambio de pactos: los pactos de la Moncloa, los pactos de los estatutos, los pactos de la LOAPA, los del Majestic, protagonizado por los que hoy sabemos que se 'estaban embolsando nuestro dinero. Pactos hechos por unos poderes autonómicos corrompidos y subordinados al estado central. Pactos como los de la transición, en que las élites de los diferentes territorios trabajaron a fondo para descuartizar el proyecto de Países Catalanes, hasta prohibirlo constitucionalmente.

Algunos de estos que han hecho del pacto y del servicio al poder económico su cultura política, ahora dicen que quieren encabezar las reivindicaciones populares. Pero lo que quieren en realidad es evitar perder su poder. Las élites económicas y políticas de este país ni quieren ni pueden materializar la independencia. Sólo la fuerza organizada de las clases populares será capaz de ganar esta batalla. Hay que destituir estas élites de la dirección política y económica de los Països Catalans.

Nuestra gente, el pueblo trabajador y las clases populares, están sufriendo duramente los efectos del sistema capitalista. Las condiciones de vida son cada vez más duras y la diferencia entre las clases dirigentes y la clase trabajadora es cada vez mayor. El desmantelamiento de los derechos sociales va a toda máquina gracias a la sintonía de CiU, PP y PSOE. Asimismo, también sufrimos los efectos de políticas retrógradas en materia de derechos lingüísticos, de género, civiles, etc Una vez más, nos mantenemos firmes y volvemos a explicitar que desobedecer ante leyes impuestas contra nosotros. Leyes como la del ministro Wert que nos niega nuestro derecho a la educación del y para el pueblo catalán. Leyes como la de la reforma del aborto que nos niega el derecho al propio cuerpo.

Necesitamos cambiar de régimen. Necesitamos una República de los Països Catalans. Pero también necesitamos cambiar de sistema. Necesitamos la independencia para cambiarlo todo. Queremos independencia, socialismo y feminismo para los Países Catalanes.

En este camino hacia la libertad tenemos una cita importante el próximo 9 de noviembre. Y avisamos: el pueblo catalán que no necesita permiso para ser soberanos. Avisamos, una vez más, que ya no aceptaremos otra pacto y que el Principado votaremos, pase lo que pase, el próximo 9 de noviembre.

La desobediencia es imprescindible para poder llevar a cabo cualquier cambio social o político en profundidad. Por tanto, habrá que ejercer la desobediencia para ser libres.

Països Catalans, 11 de septiembre de 2014